Trigésima sexta
parte (36º envío)
LA PRIMERA
GUERRA MUNDIAL DIA A DIA
por Carlos Enrique Fonseca Sánchez
26 DE JULIO
En Rusia el
gobierno convocó con urgencia al Consejo de Estado y a la Duma, que apoyaron
rápidamente la entrada en la contienda. El auge patriótico resurgió en todas
partes, y acabó momentáneamente con algunos de los conflictos sociales y
políticos entre partidos. Las huelgas casi de inmediato se suspendieron. Las
fortalezas rusas en zonas fronterizas con Alemania y Austria-Hungría son
puestas en estado de guerra.
El Rey Jorge V de Gran Bretaña y su primo el zar Nicolas II de Rusia |
El gobierno
francés cancela todas las licencias al personal militar y ordena el regreso a
Francia de la mayoría de las tropas estacionadas en Marruecos.
El pequeño estado
balcánico Montenegro aliado de Serbia, ordenó la movilización completa de su
ejército de 50 mil soldados.
El ministro de
Asuntos Exteriores británico, sir Edward Grey, tratando de mediar entre las
potencias, insiste y propone que las potencias más poderosas, Gran Bretaña,
Francia, Rusia, Alemania e Italia se reunieran en una conferencia para arbitrar
en la disputa austro-serbia. Francia e Italia están de acuerdo en participar,
Rusia también, pero Alemania declinó dicha oferta y todo fracasa. El ministro
ruso Sazonov y Grey no pudieron logran convencer a los alemanes de que se unan
a una mediación entre Viena y Belgrado.
Serbia y Bulgaria
agudizando problemas anteriores rompen relaciones diplomáticas.
El Káiser alemán
Guillermo II llega a Kiel de un crucero en el mar del Norte. Él estaba seguro
que Rusia no lucharía en la eventual guerra. El Káiser alemán volvió a su
palacio de Potsdam y celebró una conferencia con los principales líderes
civiles y militares, discutiéndose la idea que Alemania amenace a Rusia si esta
comenzaba su movilización y sus preparativos militares.
El Canciller
austriaco Conde Berchtold recibió la respuesta de Serbia y escondió los
documentos durante dos días. Austria-Hungría movilizó parcialmente ocho cuerpos
de ejército en la frontera rusa. El jefe del ejército imperial austro-húngaro mariscal
Conrad von Hoetzendorf dijo a Berchtold
que una invasión austríaca a Serbia no sería posible, solo en algunas semanas.
En Viena
rechazaron la propuesta rusa para sostener conversaciones con respecto a
Serbia. Rusia declaró que movilizara sus fuerzas en la frontera austro-húngara
si Austria marchaba hacia Serbia.
Reservistas austriacos rumbo a sus cuarteles |
Berlín pidió a
Francia -que mostró una pasividad sorprendente durante toda la crisis de julio-
que presionase a Rusia para que no interviniera. París aceptó a condición de
que Berlín hiciera otro tanto con Austria, lo que Alemania rechazó.
El gabinete del
ministerio de relaciones exteriores alemán cree que Francia y el Reino Unido se
mantendrán ajenos a la crisis. El general Helmuth Von Moltke jefe del estado
mayor alemán expresa su desagrado por la demora en atacar Rusia.
El Rey Jorge V
expresa al Príncipe Enrique de Prusia y a Alemania que el Reino Unido desea
permanecer neutral en caso de guerra.
Itsvan Tisza Primer ministro hungaro |
Después de un
viaje complicado, el general Putnik regresó a Serbia y ofreció su dimisión al
rey Pedro I de Serbia por su resquebrajada salud y su edad pero fue rechazado,
el rey insistió a Putnik tomar el mando del ejército, aunque sólo sea en un
sentido estratégico, mientras que los generales más jóvenes, como Stepa
Stepanović, Zivojin Mišić y Petar Bojović se harían cargo de las operaciones
militares. Putnik tuvo que pasar la mayor parte de su tiempo en una habitación
bien caliente.
Multitudes de
personas a favor de la guerra emocionadas se reúnen en las calles de Berlín ,
Viena y París , en este último gritando "¡A Berlín!", que los
lectores del libro “Nana” de Emile Zola recordarán también gritaron en
1870. Un "prominente banquero"
en Berlín le dice al reportero del New York Times, "La atmósfera se había
vuelto insoportable; la guerra será un alivio”.
En Francia, durante
el sonado juicio a Madame Caillaux por el asesinato del editor de “Le Figaro”,
las cartas del ex ministro Joseph Caillaux a su entonces amante, la actual
Madame Caillaux, finalmente se leen en los tribunales y dejan en claro que la
relación era adúltera y ya quería poner fin a su matrimonio al leerse ("Lo
que es molesto para los dos es que durante largos meses tendremos que emplear
precauciones extremas "). Como el abogado llegó lo de "Mil millones
de besos sobre cada parte de su pequeño cuerpo adorable," Madame Caillaux
desmayó.
Hubo un animado
debate entre dos de los jueces en el caso, sobre el manejo del juez que preside
el juicio, que termino en un reto a un duelo, entre los dos jueces. Pero
primero, tienen que solicitar al Ministerio de Justicia el permiso para el
duelo
En un artículo no
confirmado pero bastante polémico, Edmund Paris en su obra “El Vaticano contra
Europa”, The Wickliffle Press. p. 14. dice: “El Papa Pío X en su odio por los
cristianos ortodoxos continuamente incitaba al emperador Francisco José de
Austria- Hungría a eliminar a los [serbios]. Después de lo que sucedió en
Sarajevo en julio 26, 1914, el Barón Ritter un representante de Bavaria al
Vaticano le escribió a su gobierno: “El Papa aprueba el trato terrible que se
le está dando a Serbia. Él no tiene muy buena opinión de los ejércitos de Rusia
y de Francia en el caso de la guerra con Alemania. El Cardenal, Secretario de
Estado, no veía que Austria pudiese hacer guerra si no decidiese hacerlo en ese
momento...” Allí en sus colores reales, estaba el Vicario de Cristo [el Papa],
el gentil apóstol de la paz, el santo pontífice cuyos autores piadosos parecían
haber muerto de tristeza al ver el surgimiento de la guerra”. Como les dije es
bastante insidioso y no lo confirmo. Pero se puede encontrar en la web
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